Es el título de un artículo redactado para la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina (AMJA) por la Dra. Mariel Linardi.
La Dra. Mariel Linardi es Juez de la Cámara Civil N° 1 de la Segunda Circunscripción Judicial e integrante de la Comisión Directiva y Delegada Provincial Suplente de la Asociación de Mujeres Jueces de Argentina (AMJA). Desde ese rol reflexionó acerca del papel que juega el teletrabajo a fin de garantizar a todos los ciudadanos el acceso a la Justicia.
Cabe recordar que hace unos días, junto a magistradas y funcionarias de la provincia de San Luis, la Dra. Linardi participó de una campaña de concientización en el marco de la prevención del coronavirus. Bajo los los hashtags #quedateencasa y #nosadaptamos, socias de todo el país, continúan trabajando desde sus hogares, de manera remota, y desde los juzgados y oficinas de turno, para seguir prestando el debido servicio de justicia, tomando todas las precauciones necesarias.
A continuación se transcribe el artículo redactado por la Dra. Linardi. Para leer el mismo en la página web de AMJA debe ingresar al siguiente enlace http://www.amja.org.ar/?p=2782
El teletrabajo una herramienta estratégica en tiempos de “pandemia covid-19”.
El Aislamiento, Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) dispuesto por el Poder Ejecutivo Nacional a los fines de evitar la propagación del Covid-19, llevó a los distintos Poderes Judiciales a repensar la forma de impartir justicia en forma no presencial mediante el Teletrabajo, a fin de garantizar a todos los ciudadanos el Acceso a la Justicia, derecho de raigambre constitucional, a pesar de esta emergencia de salud pública y crisis humanitaria.
No puedo soslayar que también hay excepciones a esta forma de trabajar en forma no presencial, como los casos penales y de violencia familiar, cuando ameritan la presencia de los magistrados, funcionarios y algunos agentes judiciales en sus dependencias, que se realizan con los recaudos de protección necesarios.
Los Poderes Judiciales en su gran mayoría recurrieron al “Teletrabajo” como una herramienta estratégica, para que la Justicia siguiera funcionando a pesar del (ASPO) en tiempos de crisis, cumpliendo con las disposiciones del Poder Ejecutivo Nacional y de los Poderes Ejecutivos Provinciales, y de esta forma las “TICS” se convirtieron en herramientas valiosísimas para seguir trabajando desde los hogares, con el uso de dispositivos tecnológicos con aplicaciones para teletrabajar y con asistencia técnica remota; el expediente digital cobró fundamental importancia para los Poderes Judiciales que lo han implementado, como la utilización de videoconferencias con distintas plataformas virtuales, correos electrónicos, y también tomaron relevancia los celulares, whatsapp, para seguir trabajando desde “Casa”.
Los integrantes de las distintas unidades que conforman los Poderes Judiciales, trabajan en forma remota desde sus hogares, articuladamente bajo la dirección y supervisión de los responsables de las mismas, con una comunicación fluida, cuidándose, cuidando al otro y garantizando el “acceso a la justicia” de los ciudadanos en tiempos de Pandemia.
Así ha tomado un gran protagonismo ante este nuevo desafío que nos presenta el Covid-19, la videoconferencia, herramienta tecnológica que facilita la comunicación y ejercicio de los derechos en forma no presencial, que ha permitido realizar mediaciones a distancia en forma exitosa; los niños/ñas, adolescentes y jóvenes han sido escuchados en los procesos en los que se encuentran inmersos a los fines de tutelar sus derechos, cumpliéndose de esta forma con “el derecho a ser oído” garantizado por la Convención de los Derechos del Niño norma de rango constitucional ( art.75 inc.22 CN), Ley 26.061, y disposiciones del Código Civil y Comercial de la Nación, Como decimos en AMJA en tiempos de Pandemia “Nos Adaptamos-Trabajamos desde Casa”.
Fuente: Dra. Mariel Linardi
Redacción: R. Zitta