La fiscalía solicitó la eximición de sanción a Juan Manuel Moyano –por el principio del régimen de minoridad- y la absolución del resto de los imputados.
Hace instantes, en la Sala de Juicios Orales N° 1 de la ciudad de San Luis, se llevaron a cabo los alegatos en el debate oral en donde se juzga el homicidio de Roque Aníbal Ponce.
Dando inicio a los alegatos, la representante del Ministerio Fiscal, Dra. Diana Bernal, realizó un análisis y resumen del caso, en donde sostuvo que “a criterio de este Ministerio Fiscal, ha quedado acreditado y debidamente corroborado que Juan Manuel Moyano estuvo la noche del asesinato en la localidad de Quines –cuando su lugar de residencia era Luján-, y que el mismo acusado, ante el Juez de Familia y ante todas las garantías Constitucionales vigentes, confesó que había sido él quien había asesinado a Roque Ponce”. En relación a las denuncias de apremios ilegales denunciados más tarde por Moyano, afirmó que “es un hecho gravísimo pero que debió ser denunciado e investigado en aquel momento, pero ello no obsta que haya declarado y asumido su responsabilidad en el asesinado de Roque Ponce”. Además, afirmó que “es cierto de que existen desprolijidades en el sumario policial, pero eso no es suficiente para ahora venir a reeditar cuestiones que, en su momento, ya fueron planteadas. Las oportunidades han precluído”.
Por último, pidió que se declare la responsabilidad de Juan Manuel Moyano como autor del delito calificado como homicidio en ocasión de robo, pero que, teniendo en cuenta que al momento del hecho era menor de edad, y en relación a los numerosos informes psicológicos y psiquiátricos realizados y su inserción social, solicitó que se lo exima de toda sanción.
En relación a los demás imputados -Carla Lucero, Víctor Jourdan y Ariel Lucero- solicitó que por aplicación del principio de la duda, se los absuelva, ya que “no tengo motivos suficientes para considerar que hubo algún tipo de complicidad por parte de los demás imputados”.
Seguidamente, la Dra. Claudia Ibáñez –defensora de Carla Lucero y Víctor Jourdan- sostuvo que la investigación policial se caracterizó por ser una cadena de actos viciados y por la arbitrariedad con las que se manejaron. “La causa se manejó en un contexto policial tendiente a buscar por medios ilegales una confesión, tendiente a doblegar voluntades para que se hicieran cargo de un hecho, y quienes terminaron doblegados, fueron precisamente los más vulnerables”, afirmó. A su vez, sostuvo que en base a estas irregularidades fue que sus defendidos terminaron vinculados en la causa, pero que la absolución a éstos debe ser lisa y llana ya que no existen elementos que generen un margen de probabilidad en la participación del crimen que se investiga.
Luego, el Dr. José Francisco Pérez, defensor de Juan Manuel Moyano, afirmó que “este proceso y el resultado de la investigación equivalen a la teoría del árbol envenenado. La investigación no sólo sufrió irregularidades, sino también verdaderas ilegalidades”. En relación a los dichos de la Dra. Bernal sobre que Moyano no había negado los hechos que se le imputaban en sus declaraciones, afirmó que Moyano no tenía por qué negarlos, ya que era inocente. Además, afirmó que para que se declare su responsabilidad, al haber sido menor al momento de los hechos, no solo debe probarse fehacientemente su participación, sino también su grado de madurez moral e intelectual. Por otro lado, cuestionó severamente los modos y formas en que se le tomaron declaración a su defendido, sosteniendo que fueron tomadas con falta de recaudos legales indispensables, y las formas en que fueron obtenidas las pruebas. Por último, solicitó que se absuelva a Juan Manuel Moyano.
Finalizando con los alegatos, el Dr. Rodolfo Mercau –por Ariel Lucero-, adhirió a los alegatos de los Dres. Ibáñez y Pérez, y afirmó que “la policía quería un culpable, se buscó un ‘perejil’ para culpar, y a partir de Moyano es que se fue involucrando al resto de los chicos”. Además, afirmó que “resultan insuficientes las pruebas para vincular a mi defendido”, y que “la investigación fue un fiasco, porque no se probó nada”, por lo que solicitó se lo absuelva lisa y llanamente. Además, pidió que se investiguen las denuncias de apremios ilegales.
Redacción: K. Chovanec